jueves, 29 de abril de 2010
En la entrada de hoy, hemos comprobado que la encuesta ha estado disputada por lo que hemos decidido poner costumbres de Luxemburgo y Hungría juntas para así poder satisfacer a todos ya que ambos países no tienen tantas costumbres extrañas como los anteriores.
Para comenzar, Luxemburgo tiene las mismas convenciones sociales de Europa. El saludo se da con un apretón de manos y es normal llevar regalos o flores si eres invitado a una comida.
A pesar de que en Luxemburgo se hablan 3 lenguas distintas, el francés es el idioma más extendido. Se puede encontrar desde las señales de tránsito hasta los menús aparecen en francés menos en algún lugar de la frontera que el idioma común es el alemán.
Un tercio de la población del ducado es extranjera. Buena parte de las personas que trabajan en las tiendas y bares vienen de Francia o Bélgica y aunque muchas personas entienden el inglés, sólo responden en francés.
Aunque el luxemburgués es la lengua nacional del ducado, la gente estará muy impresionada cuando alguien hace un esfuerzo para decir una u dos palabras en ese idioma, “Moien” es un saludo estándar y “Addi” o “a voir” es una despedida. Debemos evitar decir que su idioma es un dialecto alemán o que el país es una extensión de Francia o Alemania, ya que de esta forma se sentirán ofendidos.
Por otra parte, en Hungría, una de las características más distintivas de la sociedad es su amabilidad y predisposición al momento de recibir turistas de origen extranjero. La gente es muy sociable y abierta, los húngaros siempre tratarán de asistirlo ante cualquier duda o necesidad que tenga. El núcleo familiar en Hungría es muy valorado, los ancianos son sumamente respetados y a los niños se los trata con gran consideración y mucho afecto.
Con respecto a las propinas,generalmente, se da propina en los restaurantes y bares, sin embargo, también se le puede dar propina a un taxista, a un conserje y a toda persona que realice un servicio. En Hungría, una buena costumbre es darle la propina al camarero en el momento de pagar, y no dejarla sobre la mesa como sucede naturalmente en otros países.
Por otro lado, los húngaros no tienen la costumbre de brindar con jarras de cerveza en la mano porque esta forma de brindis les hace recordar al momento en que los austríacos celebraron su victoria sobre Hungría.
Algunas costumbres curiosas en los negocios: los húngaros evitan organizar citas de negocios en los desayunos o almuerzos. La costumbre tradicional es organizar “comidas familiares”. Sin embargo, los ejecutivos más modernos no tienen inconvenientes en acceder a un almuerzo para tratar temas de negocios. Según los ejecutivos más arraigados a las costumbres tradicionales, las probabilidades de que un negocio se cierre exitosamente, son mucho más elevadas si se tratan durante la noche, en un entorno donde una buena copa de vino húngaro y música agradable no deben faltar.
En el mundo de la gastronomía, se destacan la popular pimienta roja húngara y el célebre vino tokaji. Son recomendables también los aguardientes hechos a base de frutas, el salchichón Pick y el popular hígado de oca húngaro. Por otra parte, en Hungría, las artesanías se distinguen por su esmerado trabajo y calidad. Existen numerosos productos elaborados en madera tallada como atriles para libros, baúles, entre muchos otros más, así como preciosos bordados y encajes húngaros en el mundo textil.
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1 comentarios:
Quique: en mi opinión ambos países realmente merecen la pena visitarlos, en concreto luxembugo me llama mas a mi la atención, quizas su sociedad o cercania a la nuestra haga que me siente mas identificado, mientras que hungria tiene una cultura muy diferente a la nuestra y con gran riqueza.
Jose Manuel: A mí me atrae más hungría, aunque como dice ahí, personalmente lo considero algo así como la parte baja de austria aunque se sientan insultados, ¿nadie ha visto sissy emperatriz?
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